domingo, noviembre 20, 2011

me pide más



























¿Equivocarme hasta perder la cordura? Por supuesto.


Prefiero pedir perdón que permiso. Aquí, y ahora , vamos a equivocarnos hasta límites humillantes. No quiero más disculpas, no soportaría oír nada nuevo. Las mentiras piadosas nunca me gustaron tanto.

Ven a jugar. Acabarás perdiendo y perdido. Quien advierte, siempre traiciona.

No hay comentarios:

Publicar un comentario