sábado, marzo 10, 2012

10+8



Bueno Marini, aunque esta noche no esté contigo y no podamos celebrar tus 18 añazos por todo lo alto, quería dejarte aquí , por lo menos, una felicitación digna de mostrar lo importante que eres para mi.
Me gustaría mucho poder decirte que te conozco desde hace años, o que hemos crecido juntas, pero no es así. Sin embargo, afortunadamente, he tropezado contigo en el camino de mi vida. Con una pequeña hada que me sirve de apoyo incondicional siempre que me vengo abajo. 

No solo por los bailes sin sentido, ni por las noches de charlas hasta las tantas te has convertido en una gran parte de mi día a día, porque , sobre todo últimamente, me has demostrado que eres una amiga, en el sentido completo de la palabra. Porque me he sentido apoyada en situaciones en las que el desasosiego era la principal fuente de alimentación de todo mi alrededor. Porque he encontrado en ti un tipo de persona distinta, alguien que no juzga antes de conocer y que tiene interés por descubrir que hay al otro lado de las pupilas de una persona.



 Darle vueltas a todas y cada una de las circunstancias del día a día es difícil, sobre todo cuando parece que el resto del mundo no es capaz de entender que tus neuronas se mueven intrépidamente en busca de respuestas a preguntas absurdas, tan absurdas que ni los mejores científicos han sido capaces de resolver con el paso del tiempo. Esta capacidad de la que hablo es una de esas muchas cosas que encuentro comunes entre tu atolondrada cabecita y mi alocada mente. Una de esas muchas cosas que me hacen ver que no todo el mundo es vacío , que existe personalidad dentro de algún que otro cuerpo. Te pareces mucho más de lo que crees a mi, y creo que, entre otras cosas, por eso hemos conectado tan fuertemente.



Yo estaba escribiendo esto para darte las felicidades, para desearte que disfrutes al cien por cien de tus dieciocho años, unos dieciocho que empiezas con una amiga nueva. Otra perturbada que te hará pensar con sus intentos de novela, y te obligará a sincerarte cuando no te sientas bien. Estoy aqui también para decirte que te voy a apoyar cuando lo necesites, que te voy a decir siempre lo que mayor bien te pueda hacer aunque no sea lo que quieras oír. Para confirmarte que en MUY poco tiempo has llegado lejos en la tarea de conocerme , y a pesar de lo que muchos digan, es realmente difícil conocerme de verdad. Y te doy las gracias porque tu lo estás haciendo realmente bien, e incluso haciendome ver muchos aspectos de mi que nunca antes había observado.



En resumen, te quiero Marina, por toooooooooodas las veces que me reído delante del ordenador, y por todas las conversaciones absurdas. Por las lágrimas que me has ayudado a secarme y la de sonrisas que me has dejado compartir. Te quiero por eso, y sobre todo por todo lo que queda por delante, por los días que hemos planeado, la de veces que te tienes que quedar en mi casa, y la de veces que subiré a verte a ti, y a tu madre, que en la noche que pasé alli se me hizo una persona tan cercana que parecía que llevaba años hablando con ella. 
Te adoro mami adoptiva! 

No hay comentarios:

Publicar un comentario