lunes, enero 30, 2012

Los tiempos cambian

Curiosa y práctica frase tan fácil de adjudicar a un problema tanto para darlo por sentado como para solucionarlo.  
Dicen que la gente cambia, las circunstancias afectan y la necesidad es el motor más potente en cualquier situación. Nunca dije que quisiera ser de esta manera, afirmo , con la mano manchada de tinta, que jamás firmaría mi propio destino sin haberlo escrito yo. 


Intenté hacer las cosas de la mejor manera,  sacar un sonrisa mientras me limpiaba mis propias lágrimas no resultó tarea fácil. No era tan simple como lo pintaban en las películas. Adolescente fuerte, valiente, pero necia y crédula como la vida misma.


Parece que tardé en darme cuenta de por qué tanto esmero en mostrar una capa de mi que , en realidad, nunca había estado, era quizá un escudo protector que acabó atrayendo dagas perdidas. Dagas lanzadas a matar, disparos de combate. Siempre me sentí intrigada por la ruleta rusa, por la tensión del momento. Lo imposible se convertía en el deseo de los allí presentes. Sospecho que mis deseos resultaron aún más peligrosos que el gatillo de tu pistola.

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